Urbaser dispone del Centro de Innovación Tecnológica de Residuos “Alfonso Maíllo” (CIAM), que inició su operación en 2011. Este Centro es pionero en Europa en parte por el valor que le otorga la escala demostrativa (previa a la industrial) a la que se desarrollan los proyectos, cubriendo el salto entre la investigación fundamental aplicada (realizada fundamentalmente por universidades y centros tecnológicos) en TRL 3-6, y el desarrollo a escala demostración (TRL7-8) para finalmente llegar a su aplicación industrial.
El centro se localiza dentro de las instalaciones del Complejo para Tratamiento de Residuos Urbanos de Zaragoza (CTRUZ) y se construye fruto de la colaboración entre Urbaser y el Ayuntamiento de Zaragoza, para, entre otros, dar soporte a parte de los Proyectos de I+D+i que Urbaser desarrolla.
En el año 2015 se inauguraron las actuales instalaciones del CIAM de 5.000 m2 de superficie con un Edificio de Oficinas con Sala de Control y un Banco de Pruebas dotados de todos los servicios necesarios para llevar a cabo las actuaciones de I+D+i con las que se convirtió en un referente internacional para el sector (Figura 2). Además, cuenta con un moderno y completo laboratorio de análisis cuenta con personal cualificado y especializado, así como con equipos de las mejores marcas del mercado.
La disponibilidad de la infraestructura y recursos para poder instalar y operar plantas piloto es un factor competitivo para la participación en proyectos europeos y nacionales. El CiAM es un centro único en el sector para la validación a nivel semiindustrial de tecnología y técnicas de gestión de residuos. Es un escaparate adecuado para que URBASER pueda mostrar a sus clientes y colaboradores el esfuerzo real invertido en innovación, mejorando la imagen de la empresa hacia fuera.
El CIAM Trabaja mediante la colaboración público-privada junto a Clientes, empresas, Administraciones, Universidades y Centros Tecnológicos para estar a la vanguardia tecnológica. Colabora con los proveedores de tecnología innovadora para probarla en sus instalaciones con material real y evaluar su eficacia.
Gracias a los recursos humanos y técnicos del CiAM, éste se convierte en una llave que abre la puerta a la financiación nacional y europea en I+D+i, cuyos responsables y participantes ven en estas instalaciones una oportunidad de desarrollo exitoso de proyectos a escala preindustrial.